Chile no duerme

Editado por Maite González Martínez
2020-02-25 08:51:37

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Chile aumenta seguridad en Festival de Viña del Mar tras protestas. © REUTERS / Leandro Torchio

Por María Josefina Arce

Chile despertó y ya es difícil parar ese malestar que ha aflorado por décadas de una hiriente desigualdad. Las protestas que desde octubre pasado mantienen en jaque al gobierno del presidente Sebastián Piñera llegaron en las últimas horas al idílico escenario de Viña del Mar, en Valparaíso.

A pesar de las inusuales medidas de seguridad, en el Festival Internacional de la Canción se hicieron presentes las movilizaciones populares para mostrar el descontento hacia el presidente Piñera, así como el reclamo a las demandas sociales que no han sido atendidas por el Estado.

Las autoridades volvieron a recurrir a la violenta represión para dispersar a los manifestantes. Otra vez los carabineros emplearon los carros lanza agua y de gas lacrimógeno, un detalle que olvidó mencionar el intendente de la región de Valparaíso, Jorge Martínez, quien tildó a los manifestantes de vándalos y delincuentes.

A pesar de las extremas medidas de seguridad y la represión policial, algunos manifestantes pudieron ingresar al recinto del festival con el fin de gritar consignas en contra del presidente chileno.

En los últimos meses el territorio chileno no ha dejado de ser sacudido por movilizaciones, que se espera vuelvan a intensificarse en el venidero mes de marzo, cuando se cumplen dos años de que Piñera llegara al poder.

Para el día dos se ha convocado a una gran marcha y cacerolazo, mientras que el cinco y seis de marzo se realizarán manifestaciones en la Estación Central y en Macul.

La marcha más grande está convocada para el domingo ocho de marzo para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, y el día once, aniversario del gobierno de Piñera, se espera que los chilenos colmen las calles de Santiago, la capital.

Quizás en un intento por evitar el fuerte movimiento de protestas que ya se anuncia, Piñera dijo que el gobierno se prepara para en ese mes aumentar las pensiones y mejorar la salud.

Pero lo cierto es que ni el compromiso a un plebiscito en abril próximo, al que se vio obligado a ceder por la intensa presión popular, ha mermado el movimiento de protesta.

Chile vivió una pesadilla durante la dictadura militar, que además de las decenas de miles de muertos y desaparecidos, trajo aparejada una constitución que no refleja los intereses de todos los sectores de la población.

El modelo neoliberal puesto en marcha y que se ha mantenido aún después de lo que se ha llamado el retorno de la democracia ha hecho mella en las capas más humildes de la sociedad.

Los chilenos están cansados de tanta desigualdad, de que no se respeten sus derechos más esenciales como el acceso a la salud, la educación y el trabajo. Chile ya no duerme, despertó y está decidido a continuar reclamando por un mejor país.



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