Jornada de movilizaciones pacíficas y democráticas. Octubre/2020 | Foto: Xinhua
Por María Josefina Arce
El 2020 parece que concluirá para Colombia en medio de una convulsa situación. El descontento y enojo de los colombianos contra el gobierno del presidente Iván Duque ha ido creciendo.
Con un nuevo paro nacional iniciado la pasada semana y marchas que se extienden hasta los próximos días, las autoridades enfrentan un panorama complejo.
Ni la lluvia, ni la COVID 19 impidieron que los ciudadanos salieran a las calles la semana anterior. En Bogotá, Cali, Medellín y otras ciudades del país se vivieron intensas jornadas, enmarcadas en el aniversario del paro nacional de 2019, que conmocionó a Colombia.
Estudiantes, obreros, campesinos, mujeres e indígenas protagonizaron en esa ocasión multitudinarias marchas en contra de la política de Duque y su total desinterés ante el asesinato de líderes sociales y ex miembros de la otrora guerrillera FARC, Fuerzas Armadas Revolucionaras de Colombia.
Las protestas terminaron denunciando también el excesivo uso de la fuerza por la policía, tras la muerte del joven Dilan Cruz a manos de un agente del Escuadrón Móvil Antidisturbios durante la represión de una marcha.
La llegada de la COVID 19 trajo un impasse en las manifestaciones, pero en septiembre último los colombianos retomaron con fuerza su denuncia ante la falta de respuesta gubernamental.
Colombia se acerca a las 80 masacres en este año, sin que las autoridades hayan puesto coto a las acciones de los grupos paramilitares y criminales que se disputan territorios para el narcotráfico.
La sociedad ha demandado que se respete el acuerdo de paz suscrito hace ya cuatro años entre el entonces presidente Juan Manuel Santos y la antigua Fuerzas Armadas Revolucionaras de Colombia-Ejército del Pueblo.
El panorama no ha mejorado. La COVID 19 ha empeorado las condiciones de vida de los más pobres y ha sacado a la luz las debilidades del sistema sanitario.
Los colombianos exigen también la protección a las mujeres y los sectores más vulnerables, el salvamento de pequeñas y medianas empresas y la atención al agro.
Hoy la nación suramericana, de acuerdo con los expertos, enfrenta la primera recesión en dos décadas, con un desempleo urbano que alcanza el 18,3 por ciento.
En el ámbito sanitario Colombia está entre los países de América Latina que presentan un elevado número de contagiados y fallecidos, y su personal médico se ha quejado de las pésimas condiciones en que labora.
Los colombianos están enojados y quieren un cambio de rumbo del gobierno del presidente Iván Duque, quien, han denunciado, no escucha las demandas de toda una sociedad.
