Por Pedro Martínez Pírez
Este domingo he disfrutado como periodista dos acontecimientos que me confirman la buena marcha de Cuba y Venezuela. En La Habana el ingeniero Miguel Díaz-Canel, Presidente de Cuba, se reunió con jóvenes en el Parque Benito Juárez, y en Venezuela, gracias a TeleSur, pude seguir la transmisión minuto a minuto de las elecciones parlamentarias a la cual asistieron numerosas personalidades del mundo.
El mandatario cubano compartió con niños y jóvenes reunidos en un acto por los aniversarios 50 de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media y 56 de las Brigadas Técnicas Juveniles, y allí resaltó la respuesta del pueblo cubano en defensa de la paz y la tranquilidad, frente a las recientes provocaciones financiadas por el gobierno de Estados Unidos.
Denunció Díaz-Canel que en los últimos minutos de su mandato la administración Trump intensifica sus acciones agresivas contra Cuba, alienta shows mediáticos y trata de dividir a la juventud cubana y de crear en el mundo una falsa imagen sobre la situación del país.
A todo ello, agregó el presidente cubano, nos enfrentamos con serenidad, convicción y amor por Cuba y la Revolución.
Y porque TeleSur es un canal que puede verse en Cuba las 24 horas del día, disfruté las palabras del ex presidente boliviano Evo Morales, las del ex presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero y también las del escritor y periodista hispano-francés Ignacio Ramonet, todos presentes en Caracas.
Sin mencionar por su nombre al presidente de Ecuador, L. Moreno, quien anticipó que no reconocería el resultado de las elecciones de este domingo en Venezuela, el ex presidente español criticó a quienes sin visitar a Venezuela, y conocer su realidad, se hacen eco de la fallida política impulsada por el gobierno de Donald Trump.
Y parece que a la derrota del pasado 3 de noviembre el presidente saliente de Estados Unidos debe agregar los fracasos de su política hacia Venezuela y también hacia Cuba.
Venezuela, por haber desarrollado en paz las elecciones para crear una nueva Asamblea Nacional, y Cuba por haber logrado desenmascarar al grupúsculo que protagonizó el show en la barriada habanera de San Isidro, e impulsar el diálogo fecundo con los jóvenes no contaminados con la política imperial.
La Venezuela de Bolívar quien hace muchos años advirtió que los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia para plagar de miserias a la América , y la Cuba de Martí, quien vivió en el monstruo y le conoce las entrañas. Y el mexicano que le dio su nombre al Parque donde este domingo estuvo Díaz-Canel, el Benemérito de las Américas Benito Juárez, quien advirtió que el respeto al derecho
