Guatemala, 30 jun (RHC) Los guatemaltecos continúan expuestos a finas partículas de polvo provenientes del desierto de Sahara, África, un fenómeno recurrente que podría causar efectos negativos para la salud.

De acuerdo con la Coordinadora para la Reducción de Desastres (Conred), la arena entró a territorio guatemalteco el pasado jueves y permanecerá durante cinco días, por lo cual se deben extremar las medidas preventivas sobre todo con las personas que padecen enfermedades respiratorias crónicas o del corazón.

El polvo en suspensión podría agravar la incidencia de conjuntivitis, laringitis o bronquitis, alertó la Conred.

Entre las recomendaciones indicadas se encuentran usar mascarillas o un pañuelo de tela húmedo para cubrir la boca y nariz, portar gafas protectoras y lavarse los ojos con abundante agua hervida ante la sensación de cuerpo extraño.

Según los especialistas los grupos de riesgo identificados son los recién nacidos, menores de edad, mujeres embarazadas, adultos mayores y personas que realizan actividades al aire libre.

Las partículas del polvo del desierto de Sahara tienen un tamaño menor a 100 micras, pueden elevarse a una altura de 5 a 7 kilómetros y forman una masa de aire caliente que al ser arrastrada por los vientos puede llegar a miles de kilómetros. (Fuente:PL)