Bávaro, 25 ene (RHC) El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ratificó que el compromiso de la CELAC - Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños - es luchar por la paz.
Al intervenir en la sesión plenaria, advirtió Ortega que la zona no se pacificará plenamente hasta el cese del bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno de Estados Unidos contra Cuba desde hace más de medio siglo.
A su vez el primer mandatario de Bolivia, Evo Morales, aseveró que las políticas de privatizaciones y el neoliberalismo impuesto a América Latina han sido un rotundo fracaso.
Mientras el vicepresidente uruguayo, Raúl Sendic, planteó la necesidad renovar los esfuerzos por el desarrollo con equidad y consideró preciso evaluar la dimensión social de los procesos de integración regional.
En su discurso en la V Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), el vicemandatario llamó a afrontar mayor estabilidad y crecimiento dinámico de la economía, con mayor inclusión, en esta época de desaceleración.
Sendic advirtió sobre los grandes cambios y retos que impone la agenda de un mundo inmerso en la incertidumbre económica.
Al respecto, expresó que la combinación de un persistente sesgo recesivo y el proteccionismo llevan a una coyuntura especialmente difícil para las economías latinoamericanas.
Estimó que se deberá rediscutir su patrón de inserción internacional que, desde hace años, se transformó en una restricción estructural al crecimiento de largo plazo, con lo cual se corre el riesgo de retroceder y perder los logros sociales alcanzados en la última década.
El vicepresidente uruguayo manifestó que si bien América Latina incrementó su Producto Interno Bruto y dio pasos significativos en la reducción de la pobreza en la última década, no avanzó lo suficiente en la merma de la desigualdad.
La existencia de sociedades civiles débiles, dijo, junto con grandes distancias territoriales, "nos debe imponer un análisis redoblado de los programas de integración física en la región" y de mecanismos cada vez más amplios de participación de la sociedad civil organizada.
Sendic aseveró que no es posible hablar de desarrollo con equidad, de justicia social, ni de una paz estable y duradera en la región si no somos capaces de atender los desafíos que se plantean.
Mencionó entre ellos los relacionados con la salud, educación de calidad, inserción laboral, participación ciudadana, diversidad, acceso a la cultura y la mejora de la calidad de vida.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz, ratificó el compromiso de su país con la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños(Celac), a la que consideró de gran valor para la región.
Desde aquí debemos consensuar posiciones y hablar con una sola voz frente a los momentos desafiantes y de incertidumbre que estamos viviendo, aseguró el canciller chileno en la V Cumbre de la Celac, en República Dominicana.
Por eso valoramos los avances que ha hecho esta organización, pero reconocemos que todavía hay mucho por hacer, opinó Múñoz al intervenir en el segmento de alto nivel.
Para avanzar en un entendimiento regional, consideró necesaria la convergencia de ideas que promuevan la articulación de intereses en los asuntos donde existan coincidencias, pese a las legítimas diferencias.
Además, sugirió nuevas fuentes de entendimiento que superen las diferencias ideológicas y subregionales.
Asimismo, instó a la Celac a convertirse en el punto de confluencia y de coordinación efectiva del diálogo político de la región o de lo contrario puede perder fuerza y relevancia, señaló.
Frente a las amenazas comunes, al escenario inestable e incierto, debemos aunar esfuerzos y voluntad politica para enfrentarlos, puntualizó.
Por otra parte, agradeció la solidaridad de sus hermanos latinoamericanos y caribeños por la catástrofe natural que vive su país con los incendios forestales.
