La Habana, 21 abr (RHC) Sin presentar prueba alguna, Estados Unidos e Israel acusaron este viernes al gobierno de Siria de poseen aún armas químicas.
Desde Tel Aviv, el secretario de Defensa de Estados Unidos James Mattis, junto a su homólogo israelí Avigdor Lieberman, dijo que no deberían existir dudas entre 'la comunidad internacional de que Siria ha retenido armas químicas en violación de su acuerdo' (de 2014) para eliminar todas esas sustancias en su poder.
'Puedo decir con autoridad que han retenido a algunas' armas, enfatizó Mattis.
Por su parte, Lieberman, quien al igual que el secretario de Defensa estadounidense eludió aportar detalles sobre sus afirmaciones, aseguró estar '100 por ciento (seguro) de que el régimen de (Bashar Al) Assad usó armas químicas contra los rebeldes'.
Esta semana, poco antes de la visita de Mattis a israel, que realiza hoy, funcionarios de defensa israelíes afirmaron que Siria aún tiene hasta tres toneladas de armas químicas.
Entre 2013 y 2014, recuerdan analistas regionales consultados por Prensa Latina, la organización internacional para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) constató en el terreno el total desmantelamiento de las instalaciones que poseía Siria para producir esos agentes tóxicos.
Asimismo, la completa extracción segura de esas armas de todo el territorio sirio.
Este mes Washington lanzó un ataque con cohetes crucero contra un aeropuerto militar de Siria como respuesta ante un ataque con armas químicas en la provincia de Idleb, de cual acusaron, sin presentar pruebas, al gobierno de Damasco.
En sus declaraciones, Mattis amenazó asimismo a Iran de desestabilizar la región, en consonancia con la tradicional postura de Tel Aviv al respecto.
'Reconocemos la necesidad de confrontar las actividades desestabilizadoras de Irán. Irán sigue siendo una amenaza para Israel y sus vecinos con sus misiles balísticos', dijo el Secretario de Defensa.
La víspera el presidente sirio, Bashar Al Assad acusó a Estados Unidos de bloquear las investigaciones solicitadas por Damasco y Moscú sobre el ataque químico en la provincia de Idleb.
