Foto / Estudios Revolución
Por María Josefina Arce
Amplias son las perspectivas de colaboración entre Cuba y Rusia, país euroasiático con una destacada participación en los planes de desarrollo socioeconómico del archipiélago materializada en programas de cooperación en diversas esferas.
En la energía, el transporte, la siderurgia, la industria médico-farmacéutica y la científico-técnica está presente Moscú, que ha reiterado su interés de continuar apoyando a la nación caribeña en su estrategia de crecimiento económico.
Con ese fin tiene lugar en La Habana el décimo octavo encuentro de la Comisión Intergubernamental Cuba-Rusia para la colaboración bilateral, que en septiembre pasado en Moscú realizó su décimo séptima sesión.
En esa ocasión se firmaron varios acuerdos que apuestan por el intercambio bilateral que ambas partes buscan elevar hasta los 500 millones de dólares anuales.
Con pocos meses de diferencia tiene lugar esta nueva cita, lo que habla del interés de ambos estados de profundizar y ampliar los fuertes lazos de cooperación y amistad que los unen.
Colaboración que también se extiende a la educación superior. Más de 600 estudiantes cubanos de pregrado y posgrado se han formado en prestigiosas universidades rusas, gracias al programa de 100 becas anuales que ofrece el gobierno de Moscú a la Mayor de las Antillas.
La cooperación académica y científica está avalada por 94 convenios suscritos entre instituciones de educación superior de los dos países.
Rusia es además, uno de los mayores emisores de turistas al archipiélago. En 2019 más de 178 mil ciudadanos de esa nación viajaron al archipiélago y tras la pausa impuesta en 2020 por la COVID 19 se trabaja este año para reactivar el turismo.
Es así que en este mes se restablecen los vuelos entre el estado euroasiático y el balneario de Varadero, listo para recibir a los vacacionistas, siempre respetando las medidas de bioseguridad.
Excelentes son los nexos bilaterales, que el pasado año cumplieron 6 décadas de su restauración y que en los últimos años han recibido un considerable impulso con las visitas al más alto nivel como la efectuada en 2014 a La Habana por el presidente Vladimir Putin y la de un año después a Moscú del entonces jefe de estado cubano Raúl Castro.
Cuba y Rusia han destacado en numerosas ocasiones sus históricas relaciones de aliados leales y estratégicos, basadas en el respeto mutuo, la confianza, la solidaridad y la comunidad de intereses.
