El 2025 fue otro año crucial para la educación en Cuba. Los logros alcanzados en este sector estratégico muestran la voluntad del país de perfeccionar y avanzar a pesar de los desafíos.
La cobertura docente y la matrícula fueron garantizadas en todos los niveles educativos desde la primaria hasta la universidad, con especial atención a las zonas rurales y comunidades vulnerables. Una expresión del carácter gratuito, inclusivo, universal y equitativo de la enseñanza en la nación caribeña.
El anhelo de una formación integral se continuó consolidando a través del Tercer Perfeccionamiento del Sistema Educativo. Este refuerza la enseñanza de valores, la preparación científico-técnica y la educación ambiental.
Respecto a la educación técnica y profesional se ampliaron especialidades vinculadas a sectores determinantes como biotecnología, energía renovable y producción agroalimentaria. Otro de los logros de este año es el fortalecimiento de programas para estudiantes con necesidades especiales, garantizando accesibilidad y equidad.
La educación como eje estratégico para el desarrollo humano sostenible en el país se mantiene como una de las grandes conquistas y legado del eterno líder Fidel Castro. De ahí, la importancia de cada una de las acciones trazadas para la atención a los educadores que se recogen en programas de superación profesional y estrategias para la permanencia de los docentes en las aulas. Precisamente porque se reconoce la labor del maestro como protagonista de la transformación educativa, con incentivos y nuevas oportunidades de especialización.
En cuanto al impacto internacional de la educación cubana resaltan los aportes del XIX Congreso Internacional Pedagogía 2025: celebrado en La Habana. Este evento reunió a delegaciones de más de 40 países bajo el lema “Educación, Ciencia e Innovación por un Desarrollo Humano Sostenible”.
Cuba reafirmó su modelo educativo como referente regional, destacando la equidad y la gratuidad como pilares. Se debatió sobre los retos de la digitalización, el cambio climático y la cooperación internacional en materia educativa.
Otro de los resultados de este 2025 en el cual se sigue trabajando con determinación es en la innovación y tecnología educativa. Se constata en los avances que muestra la digitalización de contenidos escolares, con plataformas nacionales que facilitan el acceso remoto a materiales de estudio. Se ha logrado mejorar aún más la introducción de recursos audiovisuales y herramientas tecnológicas en las aulas, sin perder el carácter humanista de la educación cubana.
Aunque persisten desafíos como el impacto negativo del bloqueo aplicado por el gobierno norteamericano contra el pueblo cubano, las diversas limitaciones materiales que trae como consecuencia, la necesidad de modernizar infraestructuras y ampliar conectividad, actualmente se trabaja para una mayor vinculación entre escuela y comunidad, integrando a los estudiantes en proyectos sociales y productivos.
El sistema educacional cubano se proyecta para el nuevo año en consolidar aún más la enseñanza de los idiomas, reforzar la educación ambiental como eje transversal y ampliar la formación docente en áreas tecnológicas. Evidentemente la educación en Cuba este 2025, se fortaleció como sistema y también como un proyecto de nación en constante crecimiento y perfeccionamiento.
