En un encuentro bilateral calificado como “excelente” por ambas partes, los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Estados Unidos, Donald Trump, sentaron las bases para destrabar una compleja agenda comercial y avanzaron en la postura regional de Brasil, que incluye una oferta de mediación para suavizar las hostilidades estadounidenses hacia Venezuela.
La reunión, celebrada este domingo, al margen de las cumbres de la ASEAN, en Kuala Lumpur, marca un punto de inflexión en la relación bilateral, que había atravesado su peor momento en décadas tras la imposición de aranceles del 50% por parte de Washington a productos brasileños y la aplicación de sanciones mediante la Ley Magnitsky contra autoridades del país suramericano.
El canciller brasileño, Mauro Vieira, en una declaración a la prensa manifestó que el mandatario brasileño abordó de frente estos temas.
El presidente Lula comenzó diciendo que no había asunto prohibido, y presentó el pedido brasileño de suspensión de las tarifas impuestas a la exportación brasileña durante un periodo de negociación, de la misma manera que la aplicación, el recurso, la Ley Magnitsky”, relató Vieira.
Según el jefe de la diplomacia brasileña, la respuesta de Trump fue positiva. El mandatario estadounidense se comprometió a dar instrucciones a su equipo para “que comience un proceso, un periodo de negociación bilateral que debe comenzar hoy todavía”, con el objetivo de resolver los puntos de fricción “en poco tiempo”.
Sin embargo, el aspecto geopolítico más significativo de la conversación fue la reafirmación de Brasil como un actor conciliador en la región.
Sí, el presidente Lula levantó el tema [de Venezuela], dijo que América Latina y América del Sur, específicamente donde estamos, es una región de paz, y él se preparó a ser un contacto, ser un interlocutor, como ya fue en el pasado con Venezuela, para buscar soluciones que sean mutuamente aceptables y correctas”, dijo.
Esta declaración posiciona a Brasil como un puente potencial entre Washington y Caracas, en un momento de alta tensión internacional.
El tono durante el encuentro fue descrito como cordial y distendido. Vieira mencionó que Trump “declaró admirar el perfil de la carrera política del presidente Lula”, en una clara referencia a su encarcelamiento y posterior absolución.
Ambos mandatarios establecieron visitas recíprocas futuras, con Trump expresando su deseo de visitar Brasil y Lula aceptando una futura invitación a Estados Unidos.
“El presidente Trump dijo que admira el Brasil, que le gusta inmensamente el Brasil y el pueblo brasileño”, añadió el canciller.
En la reunión de Malasia Lula conversó con Trump sobre Venezuela. pic.twitter.com/FMSA0OuXQ3
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) October 26, 2025
Fuente: TeleSur
