El director del Centro de Estudios del Sur Global de la Universidad Normal del Este de China, Xiong Jie, afirmó hoy que la cooperación sur-sur se fundamenta en los principios de igualdad y autonomía.
En entrevista con Prensa Latina, subrayó que en este sentido China propone un modelo distinto al de las potencias imperialistas en el sistema global.
Según el experto, el gigante asiático no busca “coaccionar ni convertir a otros países en sus dependencias”, sino impulsar una estructura internacional abierta y multilateral.
Indicó que este enfoque difiere del sistema histórico de centro-periferia creado por el colonialismo, al tiempo que recordó que China actúa como parte del Sur global y promueve un orden internacional sustentado en “igualdad y apertura”.
Xiong sostuvo que los desafíos de las iniciativas globales propuestas por Beijing, en particular la Iniciativa para la Gobernanza Global, tienen raíces históricas.
Apuntó que durante siglos la administración del Sur Global estuvo marcada por un modelo colonial que creó dependencia estructural hacia Europa y Estados Unidos.
Recordó que este esquema dejó a muchos países sin capacidad para formular leyes, diseñar políticas o planificar su desarrollo.
En su opinión, cuando Beijing impulsó la Iniciativa de la Franja y la Ruta en esos Estados, asumió que sus gobiernos tenían una capacidad autónoma similar a la china.
En este sentido, aseguró que la falta de capacidad estatal de esas naciones tiene causas históricas y no es responsabilidad de ninguna de las partes.
Para Xiong la academia y los responsables de políticas públicas en China deben coordinar esfuerzos para apoyar ese proceso.
Sobre el Foro Académicos del Sur Global que finaliza hoy, dijo que este promueve la integración entre investigación y práctica política.
El experto dijo que el foro también analiza la concentración del poder tecnológico digital, al tiempo que recordó que Estados Unidos mantiene una posición dominante en Internet y en la infraestructura tecnológica lo cual impacta la seguridad nacional, la soberanía jurídica y la gestión de datos.
Fuente: Prensa Latina.
