El riego móvil con energía solar ha emergido como una solución innovadora y sostenible en el ámbito agrícola, transformando las prácticas de riego en diversas regiones del mundo. Esta tecnología aprovecha la energía solar para alimentar sistemas de riego que son flexibles y adaptables a diferentes tipos de cultivos y terrenos. Su implementación no solo contribuye a la eficiencia del uso del agua, sino que también reduce los costos operativos y la dependencia de combustibles fósiles.
A nivel mundial, la agricultura enfrenta desafíos significativos, incluyendo la escasez de agua, el cambio climático y la creciente demanda de alimentos. El riego móvil con energía solar se presenta como una respuesta efectiva a estas problemáticas. Al funcionar independientemente de la red eléctrica, estos sistemas permiten a los agricultores acceder al riego incluso en áreas remotas, lo que amplía considerablemente las posibilidades de cultivo en zonas áridas o semiáridas.
Sin embargo, a pesar de sus múltiples beneficios, la adopción del riego móvil con energía solar aún enfrenta obstáculos significativos, como la necesidad de inversiones iniciales y la falta de capacitación técnica en algunas comunidades.
Tabacaleros cubanos por la innovación en el riego
Ante la crítica situación energética que enfrenta Cuba, el sector tabacalero en Pinar del Río, conocido por ser el corazón de la producción de la hoja de tabaco, está implementando una estrategia ambiciosa para mitigar los efectos adversos de esta crisis. Este esfuerzo, liderado por Osvaldo Santana Vera, coordinador del Grupo Empresarial Tabacuba, busca garantizar el riego eficiente de sus cultivos a través de una rápida adopción de tecnologías sostenibles.
Los equipos asegurarán seis riegos como promedio que demandarán unas 150 hectáreas. Fotos: Ronald Suárez Rivas
Santana Vera comentó al Diario Granma que, en la actualidad, más de mil posiciones de riego dependen de un suministro eléctrico estable para cubrir unas 4,840 hectáreas. Conscientes de esta vulnerabilidad, han puesto en marcha un programa que aspira a integrar fuentes renovables en la totalidad de estas áreas de cultivo para la campaña 2026-2027. Para la cosecha actual, se han introducido sistemas de riego fotovoltaicos móviles que operan mediante paneles solares, capaces de proporcionar hasta 22 litros de agua por segundo. Esta innovación no solo es portátil, lo que permite su desplazamiento hacia las áreas donde se necesiten, sino que también optimiza el uso de la energía solar al adaptarse automáticamente a su posición a lo largo del día.
Además de estos sistemas, ocho grupos electrógenos móviles han sido desplegados para alimentar posiciones de riego convencionales, asegurando así que cerca de 800 hectáreas se mantengan operativas. El trabajo no se detiene ahí; se han recibido más de 300 sistemas fijos de energía solar y se han capacitado brigadas especializadas para la instalación de estas tecnologías, acelerando su implementación.
Las proyecciones son prometedoras y buscan transformar completamente el riego en este sector estratégico. En enero, se prevé la llegada de mil nuevos sistemas de riego, con el objetivo de que, para la próxima campaña, el 100% de las áreas de riego dependan de fuentes renovables. Este enfoque innovador y sostenible representa, por un lado, una respuesta efectiva a la crisis energética, y por otra parte, garantiza el futuro del tabaco cubano, vital para la economía nacional.
