El amor por Cuba: esencia de la ONG Camaquito.

Editado por Maite González Martínez
2021-06-19 12:32:36

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Por María Josefina Arce

Cuba enamora. Son muchos los que se rinden ante su belleza natural,  su historia, costumbres, cultura y la calidez e idiosincrasia de sus habitantes, en los que se sintetizan  raíces africanas y españolas.

Y a ese sentimiento que genera se debe la creación de la Organización NO Gubernamental Camaquito, que el próximo lunes cumplirá dos décadas de vida junto al pueblo cubano.

Con sede en la provincia de Camagüey, fue fundada por el ciudadano suizo Mark Kuster el 21 de junio en Suiza y dos años después se extendió a Alemania, países donde se recaudan fundamentalmente los fondos para la ONG con gran impacto en la vida socioeconómica.

Numerosos proyectos de colaboración ha llevado a cabo Camaquito en territorio cubano, fundamentalmente en la llamada ciudad de los tinajones, pero con el paso del tiempo ha ampliado sus acciones a territorios aledaños.

Arrancó con la total reparación de la Escuela de Ciegos y Débiles Visuales "Antonio Suárez Domínguez" y se fue extendiendo a otros centros educativos y círculos infantiles de Camagüey.

El sector de la salud también ha recibido el apoyo de esta organización sin fines de lucro. Esencial fue su aporte a la remodelación de la unidad quirúrgica y obstétrica del Hospital Materno Ana Betancourt.

Y ante la emergencia sanitaria mundial por la COVID 19 no podía faltar el apoyo de la ONG con donaciones de insumos médicos.

En el ámbito cultural está igualmente presente la ayuda solidaria de Camaquito. Diversas donaciones han tenido como destino la Asociación Hermanos Saiz, de jóvenes creadores, la Compañía Teatral Danzaria Infantil  "La Andariega" y el Ballet de Camagüey, de gran prestigio nacional e Internacional.

En colaboración con el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos ha prestado su ayuda en la construcción de pequeños acueductos rurales en diversas comunidades que han experimentado un mejoramiento de sus condiciones de vida.

Sobresale su respaldo además,  al desarrollo de un deporte que ha ido ganando terreno en Cuba: el fútbol desde el barrio hasta el equipo de la provincia.

Nacida del amor por Cuba de un ciudadano suizo, Camaquito ha marcado la diferencia, se ha integrado de lleno con los cubanos, con quienes comparte su día a día,  sus sueños y aspiraciones de continuar avanzando en la construcción de un mejor país.



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