Fotos: Elea Masera Rigoni

Por: Nuria Barbosa León

En la ciudad de Ticino, ubicada al sur de la nación suiza y muy relacionada con la cultural italiana, existe una filial de la Asociación Suiza-Cuba, muy activa y sensibilizada con las causas justas defendidas por la isla caribeña, así lo asegura Elena Masera Arigoni al destacar el impacto positivo que ha tenido la entrega de maletas solidarias con medicinas e insumos médicos a entidades de diferentes provincias cubanas.

«En un año ya enviamos 55 maletas de 23 kilogramos», afirmó la también miembro de la directiva de la organización nacional y explicó que la acción consiste en buscar entre los viajeros que no pertenecen a la membresía de la agrupación a algún turista que pueda portar un donativo para las instituciones sanitarias de la isla caribeña.

Se le paga el boleto de avión y se le comenta acerca de la realidad cubana, de los obstáculos causados por el criminal bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos y luego se le convence de ser portador de una pequeña ayuda recaudada por los miembros de la Asociación.

Al llegar el donativo, lo espera en La Habana una persona encargada de llevar los medicamentos e insumos médicos a hospitales, policlínicas, hogares de ancianos, y otros sitios del sector de la salud tanto en la capital como en los diferentes municipios.

«De ser posible tratamos de enviar insumos que más se necesitan en la estructura sanitaria cubana, así que a veces nos piden medicamentos muy específicos y otras conocemos lo que hace falta. Nos damos a la tarea de  acopiar la mayor cantidad, a partir del aporte financiero de nuestra membresía, principalmente en las empresas farmacéuticas. También las personas nos regalan sus medicamentos y los envíamos», relata Elena Masera Arigoni.

De igual manera se integran a la labor realizada por 13 organizaciones de este tipo que funcionan en el país europeo, que también ha podido enviar contenedores con equipamientos y tecnologias que sirven para diferentes sectores de la sociedad cubana, actualmente arman la tercera carga.

«Dos veces al año nos encontramos para compartir experiencias y para proyectar más iniciativa hacia el futuro. La última reunión tuvo lugar el 21 de junio en Berna y los asistentes aprovecharon ese momento para participar en una manifestación nacional en solidaridad con Palestina», comentó.

Esa acción callejera se unen a las que se organizan cada día 17 del mes en contra del bloqueo, para recordar la fecha en que recibieron la libertad Los Cinco héroes cubanos. «Ahí informamos a la población suiza de las sanciones a Cuba por defender calidad de vida para su pueblo. Muchos suizos desconocen el alcance de la genocida política coercitiva por la propaganda tóxica que se hace de Cuba», precisó.

Añadió que la Asociación Suiza-Cuba ya cumplió 52 años de trabajo, pero  también se han econtrado con barreras impuestas por el bloqueo dentro de la nación europea ya que muchos bancos se niegan a realizar transferencia cuando está escrito la palabra Cuba.

«Incluso las personas tienen dificultades para pagar su cotización de membresía de la organización porque los bancos se niegan a recibir esos fondos», advirtió la amiga de los cubanos y dice que la dificultad es mayor cuando se trata de enviar sumas de dinero más alta por la ocurrencia de huracanes u otros fenómenos donde es necesario una ayuda urgente.

Ellos continúan trabajando por incrementar la cifra de turistas a Cuba porque ven muy importante que se pueda conocer la realidad cubana, asi que cada año organizan una delegación que realiza un periplo sociopolítico. Quieren armar otra a propósito del centenario del natalicio del líder de la Revolución Fidel Castro.

Finalizó así sus palabras vía Whatsapp: «Como asociación tratamos de ser un pequeño apoyo a Cuba, principalmente en estos momento tan convulsos de guerras imperialistas. Participamos en las movilizaciones con banderas cubanas y carteles que demandan la paz. Creemos en la lucha contra las injusticias, la prepotencia y la arrogancia del imperio. Por eso Cuba, es algo importante, porque nos da motivación para seguir trabajando, luchando, resistiendo y sobrepasando las dificultades».

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