El Gobierno de Venezuela rechazó este miércoles declaraciones “belicistas y extravagantes” del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, las que calificó de gravísima violación del Derecho Internacional y la Carta de las Naciones Unidas.
El Ministerio para Relaciones Exteriores de la nación suramericana manifestó en un comunicado:
Trump admite públicamente haber autorizado operaciones para actuar contra la paz y la estabilidad de la República Bolivariana. Esta afirmación sin precedentes constituye una gravísima violación del Derecho Internacional y de la Carta de las Naciones Unidas, y obliga a la comunidad de países a denunciar estas afirmaciones a todas luces inmoderadas e inconcebibles”.
El texto denunció que “observamos con extrema alarma el uso de la CIA, así como los despliegues militares anunciados en el Caribe, que configuran una política de agresión, amenaza y hostigamiento contra Venezuela”.
Remarcó que es evidente que tales maniobras buscan legitimar una operación de “cambio de régimen” con el fin último de apropiarse de los recursos petroleros venezolanos.
El Ministerio para Relaciones Exteriores recalcó que “las declaraciones del mandatario estadounidense persiguen estigmatizar a la migración venezolana y latinoamericana, alimentando discursos xenófobos y peligrosos”.
Recordó que en la reunión extraordinaria de cancilleres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), convocada por la presidencia pro témpore de Colombia, el gobierno bolivariano “presentó formalmente esta denuncia y demandó una respuesta regional inmediata”.

Foto: Archivo/RHC
En tal sentido, anunció que mañana la Misión Permanente ante las Naciones Unidas “elevará esta denuncia” ante el Consejo de Seguridad y el secretario general, António Guterres, para exigir a la Casa Blanca que rinda cuentas.
Exige, asimismo, que adopte “medidas urgentes que impidan una escalada militar en el Caribe, zona declarada de paz por la Celac en su segunda Cumbre en 2014, celebrada en La Habana, Cuba.
El texto oficial indicó que la comunidad internacional debe comprender que la impunidad ante estos actos “tendrá consecuencias políticas peligrosas que deben ser detenidas de inmediato”.
Fuente: Prensa Latina