
Encuentro con Tin Cremata
La Habana, 18 jul (RHC) El Salón de Mayo del citadino Pabellón Cuba acogió el espacio, Encuentro con, a cargo de la reconocida periodista Magda Resik, dedicado a conocer la vida y obra de destacados exponentes de la cultura cubana; en esta ocasión el invitado fue Carlos Alberto,Tin, Cremata, fundador y director de la compañía de teatro infantil, La Colmenita.
Durante la amena charla, “Tin” compartió testimonios sobre su relación con el teatro, recordando vivencias de su infancia, y donde destacó la figura de su padre, quien le enseñó a amar las tablas y a comprender la interpretación escénica como una actividad fundamental para conocer el mundo.
Más que realizar las actividades típicas de un niño a mi edad, me gustaba visitar los ensayos de mi padre en el teatro. Allí comprendí que la actuación es un juego; cada práctica en el escenario era diferente a las demás, evocó.
En cuanto a su trayectoria en la actuación y la dirección, el también Héroe del Trabajo de la República de Cuba mencionó que esta se manifiesta en cada una de las enseñanzas que recibió a lo largo de su vida, hasta llegar a Ucrania, donde se graduó en Ciencias Pedagógicas, y luego en el Instituto Superior de Arte en Cuba, donde perfeccionó su talento en Dirección Teatral.
En los inicios de su carrera, fundó el grupo "La Colmena", que rápidamente se transformó en La Colmenita, establecida el 14 de febrero de 1990.
Destacó, además, que su relación con el líder histórico Fidel Castro Ruz (1926-2016) trascendió el ámbito profesional para convertirse en un vínculo familiar, lo que conllevó a una entrega total a la Revolución.
Confesó entre dos de sus momentos más dolorosos, las desapariciones físicas del Comandante en Jefe y de su padre.
En "La Colmenita" y en mi obra, todo gira alrededor de nuestro Martí y, por supuesto, desemboca en Fidel, añadió emocionado.
Cremata, —adulto con corazón de niño—, ha dedicado su vida al trabajo sociocultural y comunitario dentro de su imprescindible Compañía, la cual dirige desde hace más de 30 años y que ha sido declarada "Embajadora de Buena Voluntad de UNICEF"; y con el mérito incuestionable de formar a varias generaciones de niños, inculcándoles valores morales, y amor por el arte y por la Patria.
Motivados por el pensamiento martiano, y con la voluntad de hacer el bien en cada acción, han llevado su panal de amor a los lugares más recónditos de la geografía nacional e internacional, bajo la premisa de que "tener talento es tener un buen corazón". (Fuente:ACN)