El gobierno chileno expresó este miércoles su profunda preocupación por el despliegue militar a gran escala de Estados Unidos en el Caribe y rechazó toda acción armada que ponga en riesgo la estabilidad y la paz regionales.
Un comunicado en la página de la Cancillería reafirma el compromiso de Chile con el derecho internacional y el respeto a la soberanía y la integridad territorial de los Estados.
El texto fue publicado después de que Washington enviara al Caribe esta semana al portaaviones USS Gerald R. Ford, considerado el más poderoso del mundo, el cual se suma a la movilización de buques de guerra, un submarino, aviones de combate y tropas frente a las costas de Venezuela.
A ello se añade el bombardeo contra lanchas que supuestamente transportaban drogas, con el resultado de decenas de víctimas mortales.
Chile reitera su convicción de que América Latina y el Caribe deben mantenerse como una Zona de Paz, señala el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El gobierno chileno subraya que el enfrentamiento al crimen organizado transnacional debe hacerse de manera coordinada, fortaleciendo la cooperación y la acción conjunta en los distintos espacios multilaterales.
La declaración llama a la solución pacífica de las controversias, la proscripción de la amenaza o el uso de la fuerza, y el respeto a los derechos humanos como principios esenciales de la convivencia entre naciones.
