Foto: Vértigo Político
Por: Alfredo García Almeida*
Los 32 miembros de la OTAN, se reunieron desde el pasado martes en la capital de los Países Bajos, con una agenda minimalista para evitar una catástrofe. “Nos vamos a reunir en un momento verdaderamente histórico, con desafíos significativos y crecientes para nuestra seguridad. A medida que el mundo se vuelve más peligroso, los líderes tomarán decisiones audaces para fortalecer nuestra defensa colectiva, haciendo de la OTAN una Alianza más fuerte, más justa y más letal”, aseguró el pasado lunes el ex primer ministro holandés y secretario general de la Alianza, Mark Rutte, quien poco antes envío un genuflexo mensaje a Trump, sobre el bombardeo a Irán.
“Señor presidente, querido, Donald. Felicitaciones y gracias por tu acción decisiva en Irán, fue algo verdaderamente extraordinario y algo que nadie más se había atrevido a hacer. Hace que todos estemos más seguros. Estás volando hacia otro gran éxito en La Haya esta tarde. NO ha sido fácil, pero todos han firmado el 5% [en gasto en Defensa]. Donald, nos has conducido a todos a un momento muy, muy importante para América, Europa y el mundo. Conseguirás algo que NINGÚN otro presidente en décadas pudo hacer. Europa va a pagar a lo GRANDE, como deberían y será tu victoria”.
Si bien los detalles de los objetivos de capacidades nacionales son confidenciales, trascendió que Rutte, ha podido quintuplicar las capacidades de defensa aérea, miles de tanques y vehículos blindados adicionales y millones de cartuchos de artillería para contribuir a la seguridad de los 1.000 millones de ciudadanos. “La OTAN necesitará un aumento del 400% en la defensa aérea y de misiles, miles de vehículos blindados y tanques, millones de proyectiles de artillería y debemos duplicar nuestras capacidades de apoyo, como logística, suministro, transporte y apoyo médico”, añadió Rutte.
El protagonista indiscutible, único, de la cumbre fue el presidente, Donald Trump. Por eso se previó una cita muy corta, con una cena y una sesión de trabajo nada más, en la que su intervención fue el momento principal. Un protocolo aplicado con la esperanza de contentarlo, sin reuniones sobre Ucrania ni nada largo, para que no se aburriera o perdiera la paciencia. “Todo está diseñado en torno a él”, admitió un alto cargo de la Alianza en privado. “La única misión es calmar a la bestia”.
EEUU es el aliado principal, el núcleo y sostén de la OTAN. El pasado julio se celebró en Washington su 75 aniversario y ahora realizan el nuevo encuentro, no solo por la creciente tensión geopolítica, sino porque es costumbre que se celebre un encuentro al máximo nivel, cuando la Casa Blanca cambia de ocupante.
Tradicionalmente, los líderes de la OTAN aprueban, consensuan y venden una imagen de unidad. Sin embargo esta vez, el aporte de los barbaros fue asombroso: la guerra entre Israel e Irán, ha resultado en un final de “caballeros”. Después de bombardear salvajemente a Irán con inéditas bombas, Trump anunció el fin de la guerra (sin mencionar posibles negociaciones paralelas) y agradeció a Irán su gesto de avisar antes de bombardear la base militar norteamericana en Qatar, lo que permitió evacuar a los soldados que se encontraban en el lugar.
*periodista, analista internacional colaborador desde Mérida, Yucatán.
