Por: Digna Rosa Pérez Morejón
2025 ha sido un año de grandes desafíos para lograr los propósitos de las instituciones de la cultura en Cuba, teniendo en cuenta el complejo entorno económico que vive el país, lo que ha obligado a directivos y artistas a reinventarse para satisfacer las expectativas poblacionales en materia de creación artística y literaria.
La Música ha sido la manifestación con mayor presencia en la vida cultural cubana en 2025.
El Festival Internacional Jazz Plaza fue el primer gran evento artístico en el país. Prestigiosas figuras del mundo coincidieron en La Habana y la oriental Santiago de Cuba, en un evento que se inscribe entre los de mayor importancia en el mundo.
Durante 2025 el reconocido Festival pasó a formar parte de la Alianza Internacional de Festivales de Artes de la Ruta de la Seda, que lidera China, hecho de especial significación para sus organizadores y para los jazzistas cubanos
El Instituto Cubano de la Música y la red de instituciones en La Habana han sido protagonistas de conciertos, presentaciones en comunidades, recitales y otras acciones pensadas para todos los grupos etarios.
Otros de los principales eventos musicales que en 2025 se desarrollaron en Cuba fueron, el Festival de la Salsa, la Feria Cubadisco, el Festival Internacional Boleros de Oro, encuentros entre repentistas e improvisadores, el Festival de música electrónica Eyeife, el infantil Corazón Feliz, la Fiesta de la Cubanía, El Festival Internacional de la Trova «Pepe Sánchez», el Festival del Caribe y el de la Radio Cubana, donde Radio Habana Cuba obtuvo premios en varios apartados.
El Lyceum Mozartiano de La Habana reafirmó su protagonismo en la promoción de la música clásica y en especial la del legendario austriaco con la edición del Festival “Mozart Habana”.
Igualmente, las agrupaciones cultoras de ritmos tradicionales fueron especialmente acogidas en el afamado Salón Rosado de la Tropical perteneciente a la barriada de Playa en la capital, en el espacio “Hoy como ayer», donde formaciones diversas interactúan con el público.
La noticia más trascendente durante 2025 en materia de música, fue la declaratoria de la práctica del Son como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.
Cerca de una veintena de fonogramas fueron presentados por las casas discográficas cubanas, destacando la presencia de sonoridades propias del pentagrama nacional.
En el plano internacional vale destacar el impacto de la gira “Silvio Rodríguez Tour 2025 – ¡Sudamérica en Vivo!”, que llegó, entre otras ciudades, a Santiago de Chile, Buenos Aires, Montevideo, Lima y Bogotá.
La presencia de instrumentistas extranjeros en La Habana durante 2025 también fue importante, hasta esta ciudad llegaron de Argentina el Dúo de mi Flor y Alfredo Smok, cantantes de Tango, de Inglaterra el multipremiado Lekan Babalola y Sacred Funk Quartet, artistas británicos visitaron los estudios de la EGREM, Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (disquera de mayor importancia y antigüedad en Cuba), y el prestigioso percusionista hispano Sergio Pevida impartió dos clases magistrales en la Universidad de las Artes (ISA), a donde también llegaron otros creadores musicales del mundo.
Integrantes del proyecto Rumba Intercontinental compartieron con cultores del género en Cuba, y dialogaron sobre las particularidades de las rumbas congolesa y catalana.
El canto lírico fue especialmente favorecido en 2025 con exquisitas propuestas que trajeron de retorno a sonoridades concebidas por creadores clásicos del mundo en diferentes momentos, al tiempo que cantantes de Pinar del Rio, La Habana y Holguín ofrecieron su arte ante un público conocedor.
Asimismo, las expresiones de las artes escénicas vivieron importantes momentos durante el año: Especialmente significativos resultaron los debuts en Tilandia y Bulgaria de la compañia Lizt Alfonso Dance Cuba.
La prestigiosa formación músico-danzaria habanera fue anfitriona, en el primer trimestre, de Habana Dance Intensive, experiencia internacional que por primera vez llegó a Cuba, trayendo a importantes danzantes, coreógrafos y estudiantes.
Igual de relevante resultó la estancia en China del Ballet Español de Cuba, formación que guiada por el maestro Eduardo Veitia estuvo en más de quince provincias en el Gigante Asiático con la obra “Carmen, Cuba».
Para el Conjunto Folklórico Nacional de Cuba 2025 ha sido una etapa de significativos logros.
Su presencia en escenarios de China Rusia, las islas Seycheles y Francia constataron la valía de la sexagenaria compañía que inscribió a varios de sus miembros en la nómina de la Asociación Hermanos Saíz, organización que agrupa y representa a la joven vanguardia artística cubana.
Durante la etapa que hoy se resume la renombrada agrupación estrenó la obra «Arará. Ecos del Dahomey», con la que recordó, a cien años de su natalicio, a Lázaro Ros, figura cimera y referente en el canto de ritmos afrocubanos.
Las compañías Danza Contemporánea de Cuba y Acosta Danza también protagonizaron importantes momentos en salas de teatro.
De las Artes Escénicas destacaron en 2025, además, los Festivales Internacionales de Ballet y de Teatro, así como la cita de los humoristas «Aquelarre».
El Sistema de Casas de Cultura en La Habana y agrupaciones de la Empresa del Carnaval aunaron esfuerzos en acciones comunitarias que acercaron el arte a los barrios y su gente.
Destacan en ese sentido la celebración de concursos en las diferentes manifestaciones, la notable presencia en acciones relativas al baile de Casino y los récords mundiales implantados desde Cuba, al igual que la celebración del Festival «Casino de Kubasoy», que protagoniza la compañía homónima en el municipio Diez de Octubre.
En materia de formaciones carnavalescas protagonistas de acciones comunitarias sobresalen la comparsa tradicional Componedores de Batea y el espectáculo de danza-teatro Villa de San Cristóbal.
La literatura y las artes visuales han vivido un año de exigencias y resultados positivos.
La Feria Internacional del Libro de La Habana se desarrolló en los espacios habituales y estuvo dedicada a Sudáfrica. La librería Fayad Jamis ha mantenido una interesante y sistemática programación en Habana Vieja, la parte más antigua de la capital cubana, de la mano del maestro, crítico y periodista Fernando Rodríguez Sosa.
Hablando de artes visuales el momento más importante en el periodo fue la XV Bienal de La Habana, hasta donde llegaron artistas del mundo con sus estéticas muy personales.
Los museos y galerías sostuvieron una programación estable, abriendo espacios para creadores de diversos estilos y generaciones.
El evento de arte cubano contemporáneo (Pos-it) celebró su duodécima edición, cumpliendo con su intención de ser plataforma para la promoción de jóvenes talentos en el panorama creativo de la mayor de las Antillas.
Lo más significativo durante 2025, desde la presevación del patrimonio estuvo marcado por el accionar de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana.
Sobresale el primer cuarto de siglo del programa de verano «Rutas y Andares», con un exquisito diseño, organizado para todos los sectores de la población y llegando a espacios de interes en la ciudad durante el verano.
La remodelación y retorno a la vida útil de edificaciones de alto valor patrimonial ha marcado igualmente el quehacer de técnicos y especialistas.
Desde el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural se organizaron tres importantes eventos en la segunda mitad de 2025: el Coloquio Internacional Ernest Hemingway, el Encuentro Nacional de Inventario del Patrimonio Inmaterial Afrodescendiente y el Taller de Asistencia Internacional y Planes de Salvaguardia al Patrimonio Cultural, con la presencia de expertos de Colombia y Perú, representantes de la Oficina Regional de la UNESCO y los líderes del Centro Regional para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial (CRESPIAL)
El séptimo arte marcó pautas durante los últimos doce meses, destacando entre sus acciones las dedicadas a los 65 años de la Cinemateca de Cuba.
Consagrándose como uno de los eventos más populares y esperados el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano reunió en la capital cubana a artistas y creadores del mundo. El evento propició el estreno, de filmes cubanos como «Neurótica anónima», (Jorge Perugorría), «Nora”, thriller histórico escrito por Amilcar Salatti, y “Cinco historias de amor y un bolerón desesperado” (Arturo Santana), entre otros.
Imagen tomada de Prensa Latina.
A lo largo de 2025 hubo jornadas dedicadas a la filmografía de Francia, Italia, Nicaragua, España y otras naciones, al tiempo que durante la etapa estival se estrenó el documental «Mijaín» (sobre la vida del multicampeón olímpico Mijaín López), se reactivó el cine móvil por espacios de la ciudad y clásicos restaurados volvieron a la pantalla (“Capablanca” y “Vampiros en La Habana”), entre otros.
El Fondo Cubano de Bienes Culturales y la Empresa de Representaciones Artísticas y Literarias (Artex) mantuvieron vivos momentos ‘importantes en el entramado de acciones artísticas con la celebración de las Ferias «Arte para Mamá”, «Arte para Papá”, «Arte en la Rampa” y la “Feria Internacional de Artesanía (FIART)”.
Lamentablemente en 2025 fallecieron reconocidos artistas cubanos: los premios nacionales de danza Silvina Fabars, Zenaida Armenteros y Alfredo O ‘Farrill, los músicos Edesio Alejandro, Eduardo Sosa y Paulo Fernández Gallo (Paulito FG), los actores Jorge Luis Ramírez, Mario Limonta, Felix Perez y Samuel Claxton son algunos.
Los Institutos y Consejos adscritos al Ministerio de Cultura reconocieron con Premios Nacionales a artistas consagrados y con especiales incidencias en el quehacer cultural del país, entre ellos Juan Piñera (Enseñanza Artística), Viengsay Valdés (Danza), Isabel Monal (Investigación Cultural) y Mirtha Ibarra (Cine), por solo mencionar algunos de los laureados.
Casa de las Américas desarrollo exitosamente la edición del Premio Literario Casa, evento anual al que se suman escritores, editores y otros profesionales del ramo.
Casa de las Américas es una Institución cultural cubana que tiene como principal objetivo cohesionar en torno a la integración sociocultural con América Latina, el Caribe y el mundo.
Difunde el material artístico y literario de América y el Caribe por medio de actividades de promoción, conciertos, concursos, exhibiciones, festivales, seminarios.
