Panamá, 9 abr (RHC) La joven actriz brasileña Bruna Linzmeyer reconoció lo difícil que resulta hoy para un artista vivir de su trabajo en el gigante suramericano, donde en los últimos años se observa un incremento de la producción cinematográfica.

En entrevista con la agencia de noticias cubana Prensa Latina, durante la presentación de La película de mi vida en el VII Festival Internacional de Cine de Panamá, la también modelo dijo sentirse muy privilegiada de trabajar en la televisión, pues gracias a ella puede pagar sus cuentas.

'Yo tengo muchos amigos que son actores y tienen otro trabajo para poder vivir, porque en Brasil no es fácil ser artista. Si no tienes el privilegio como yo de trabajar en televisión, es muy complicado pagar las cuentas', comentó.

No obstante, explicó que actualmente existe un movimiento muy grande de cine negro y femenino, donde tienen la oportunidad de hablar sobre muchas cosas interesantes, al tiempo que el gobierno ha destinado dinero al cine, lo cual permite mejorar las producciones.

Linzmeyer afirmó sentirse a gusto en cualquier género de la actuación, aunque tiene más trabajo en televisión y cine, medios muy diferentes que sobresalen por su alcance con el público, con el cual puede hablar sobre las cosas en las que cree.

Aseguró que pese a su corta edad (25 años) ha tenido el privilegio de trabajar con muchos directores, productores, actores y actrices que admira.

'Me siento lisonjeada de haber ascendido en mi carrera a pesar de mi juventud; pero, al mismo tiempo considero que hay una generosidad en las personas que me llaman para trabajar, porque como actriz necesito que alguien reconozca que puedo desempeñar un papel', acotó.

Al referirse a los personajes que más disfruta fue categórica en la respuesta: los que están por venir; sin embargo, reconoció que le gustó mucho la joven autista Linda de la telenovela Rastros de mentiras.

'Esta experiencia fue muy buena y profunda. Para este personaje realicé investigaciones por casi un año, trabajando como voluntaria en algunas clínicas para conocer personas con esta condición, conversé con médicos y familiares, leí libros y vi materiales sobre el tema. En realidad, fue un trabajo muy complejo', recordó.

La intérprete de Luna en La película de mi vida aseveró que la tarea más bella y difícil como actriz es la investigación que realiza para encarnar un personaje, a lo cual se suma la disposición de estar abierta a cualquier sugerencia de las personas más cercanas en el set de filmación.

Al hablar de su visita a Cuba en diciembre de 2017 durante el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana dijo que fue muy feliz, 'me recibieron muy bien y la experiencia vivida fue maravillosa', en tanto, adelantó que próximamente otro filme suyo podrá ser visto en la isla caribeña.

Comentó que actualmente trabaja en un nuevo guión de cine, pero 'no sabemos cuándo tendremos el dinero para empezar la filmación, aunque este año debo estrenar cuatro películas en Brasil'.

Por último, Linzmeyer consideró muy buena la experiencia vivida durante el rodaje de La película de mi vida, cinta con la cual ha participado en varios festivales de cine como los de Panamá y La Habana.