El presidente de Estados Unidos, Donald Trump dio este martes un paso más en su agresividad contra Venezuela al ordenar el bloqueo de todos los buques petroleros que entren o salgan de la nación suramericana.
Seis días después de la incautación de un tanquero frente a las costas de Venezuela, la administración Trump levantó la varilla de las presiones contra el Gobierno de Nicolás Maduro al que designó como “organización terrorista extranjera”, y en base a esto dispuso el “bloqueo total y completo” de buques desde y hacia ese país.
Su decisión la dio a conocer en su habitual tribuna en Internet, Truth Social, donde, además, escaló en su retórica contra el Gobierno de Nicolás Maduro, al que acusó de terrorismo, narcotráfico y robo de activos.
En su extenso mensaje en la plataforma en línea escribió que Venezuela se encuentra “completamente rodeada por la Armada más grande jamás reunida en la historia de Sudamérica” y amenazó con que el cerco militar a ese país crecerá, mientras hacía alusión a una ofensiva inédita sobre Caracas.
“La conmoción para ellos será como nunca antes la han visto, hasta que devuelvan a Estados Unidos todo el petróleo, las tierras y otros activos que nos robaron previamente”, escribió el actual ocupante del Despacho Oval al reiterar alegaciones infundadas contra su par venezolano, electo democráticamente.
Según Trump, el “el régimen ilegítimo de Maduro utiliza el petróleo de estos yacimientos robados para financiarse, el narcoterrorismo, la trata de personas, el asesinato y el secuestro”.
En esa andanada de imputaciones para justificar una eventual incursión militar terrestre en ese país, aseguró que, por estas y “muchas otras razones”, el Gobierno de Venezuela fue designado por Estados Unidos como una organización terrorista extranjera.
Dijo igualmente que los “inmigrantes ilegales y criminales” -como califica a los venezolanos que llegan a territorio estadounidense- que fueron enviados por Caracas durante la «débil e inepta» administración de Joe Biden (2021-2025) “son devueltos a Venezuela a un ritmo acelerado”.
Trump insistió en su retórica incendiaria que Estados Unidos “no permitirá que criminales, terroristas ni otros países roben, amenacen o dañen a nuestra nación” y que tampoco habrá cabida para que “un régimen hostil se apodere de nuestro petróleo, tierras ni ningún otro activo”.
Todos esos recursos, —advirtió en este mensaje subido de tono— “deben ser devueltos a Estados Unidos inmediatamente”.
Sin embargo, no pocos críticos y analistas políticos recuerdan que Estados Unidos es responsable de la ilegal retención de los activos petroleros venezolanos en el exterior, en particular la empresa Citgo Petroleum Corporation, filial de la estatal Pdvsa, lo que significa un despojo de sus recursos nacionales.
El Gobierno de Venezuela ha denunciado, además, las sanciones que sufre el país y que son utilizadas con sombrilla para apropiarse de los bienes estratégicos de la nación.
La nueva y arbitraria designación se suma a las que ya pesaban sobre el Tren de Aragua y el Cartel de los Soles (que los expertos catalogan de invención), organizaciones que Washington asegura estarían lideradas por Maduro.
De esta forma el abanico se abre en un mar Caribe militarizado hasta los dientes bajo el argumento de Trump de su controvertida campaña antidrogas.
Fuente: Prensa Latina
