Covid-19 en Francia.

Por: Guillermo Alvarado

Luego de probar varias fórmulas para detener el avance de la pandemia de covid-19, las autoridades de Francia decidieron por fin decretar el confinamiento durante cuatro semanas a partir de hoy en 16 departamentos del país, incluyendo la capital, la famosa ciudad de París.

Esta medida no será tan rigurosa como la adoptada hace un año, cuando duró más de 50 días y abarcó a todo el territorio.

Permanecerán abiertos, por ejemplo, los comercios de artículos considerados esenciales, en un concepto bastante amplio porque incluye a las librerías, funcionarán las escuelas y estará permitido hacer ejercicios al aire libre.

Fuera de eso todas las demás actividades quedaron prohibidas en un intento por frenar la tercera ola de la enfermedad, que mantiene al borde del colapso a muchos hospitales franceses, sobre todo por la presencia de las nuevas variedades del virus que son mucho más contagiosas que la original.

Las restricciones abarcan a los departamentos que pertenecen a las regiones de Isla de Francia, donde está París con 12 millones de habitantes, Altos de Francia, Sena Marítimo, Euro y los Alpes Marítimos, que incluye las costas del mediterráneo y es una zona de intenso turismo.

 Francia es el sexto país del mundo con más casos de covid-19 registrados, con 4,15 millones en un año y cerca de 92 mil fallecidos. A mediados de esta semana en sólo 24 horas se registraron 35 mil nuevos contagios y perdieron la vida 268 personas.

En la capital la situación es tan grave que algunos hospitales comenzaron a transferir pacientes a regiones menos afectadas, porque sus capacidades están llegando al límite.

Aunque ya comenzó la vacunación, este proceso avanza a un ritmo muy lento y sólo abarca a unos 5,7 millones, de los 65 millones de habitantes, por lo que demorará varios meses más.

El primer ministro francés, Jean Castex, dijo que entre los priorizados en esta primera etapa de inmunización estuvieron los ingresados en casas de ancianos y el personal de la salud.

Informó, además, el reinicio de la vacunación con el preparado de los laboratorios Astra-Zeneca, luego de que la Agencia Europea de Medicamentos dictaminó que los beneficios de ese producto superan a los riesgos.

Recientemente la Organización Mundial de la Salud advirtió a los países del llamado Viejo Continente de no flexibilizar las medidas de protección ante la pandemia, porque la crisis sanitaria global todavía está muy lejos de tener una solución definitiva.