Por Lorenzo Oquendo
La Habana, 22 mar (RHC) Este 23 de marzo es el Día Mundial de la Meteorología, conmemoración que se estableció al crearse la Organización Mundial de la Meteorología (OMM) en 1950 institución situada en Ginebra, Suiza y perteneciente a la Organización de Naciones Unidas.
El objetivo esencial de este día es recordar el imprescindible deber de proteger el medio ambiente de contaminaciones, lograr que nuestro espacio sea respirable con menores irregularidades climáticas.
La Meteorología estudia la atmósfera para describir las situaciones del tiempo en zonas y épocas concretas, también la investigación de grandes masas de aire y otras necesarias observaciones para correspondientes decisiones públicas ante afectaciones del clima.
El conocimiento de las variables meteorológicas posibilita el seguro trabajo agrícola, la navegación aérea y marítima, además de la existencia humana en sus diversas labores cotidianas con calidad y eficiencia.
Siempre debemos estar vinculados con las predicciones meteorológicas para conocer como programar nuestras actividades, que se fundamentan si en próximas horas la temperatura ambiental baja y si por el contrario sube, si habrá lluvias, sequías e inundaciones en los entornos más simples al compararlos con ciclones tropicales como máxima expresión del tiempo ambiental.
Actualmente el cambio climático aumenta en intensidad seguido del incremento de los fenómenos atmosféricos, que incluye la acidificación de los océanos, por eso es imprescindible la protección humana, medios de subsistencia unido al desarrollo sostenible y reducir los riesgos de desastres.
El lema este año por el Día Mundial de la Meteorología es Listos para el tiempo y preparados para el clima que significa estar atentos al mundo ambiental en que vivimos con protección ambiental y conocer en que medida se transforma el entorno natural para accionar de acuerdo con esas variables atmosféricas, aspectos se que se destacan en este Día Mundial de la Meteorología donde las acciones se destinan no solo a recibir sus predicciones, sino actuar en consecuencia, conocer cuando es necesario cubrirse ante irregularidades climáticas, observar su desarrollo y especialmente contribuir a evitar las contaminaciones ambientales.
Es realmente un día para meditar y continuar diariamente atentos a las variables meteorológicas e incorporarlas a nuestra existencia humana igual que otras cotidianas atenciones.