Joel Ortega: La iglesia participa en la construcción del proyecto de dignidad y justicia social para los cubanos.
La Habana, 20 sep (RHC) La iglesia cubana está en crecimiento y tiene una plena participación en el proyecto social que se construye en el país, aseguró este miércoles el reverendo Joel Ortega, presidente del Consejo de Iglesias de Cuba (CIC).
En declaraciones exclusivas a Prensa Latina, Ortega ratificó que todas las organizaciones religiosas en la isla caribeña gozan de plena libertad para la práctica de su fe, sus elementos litúrgicos y de adoración, así como para su participación en la sociedad.
El reverendo consideró que solo quienes desconozcan la realidad de la iglesia y de las religiones en Cuba, podrían señalar una supuesta limitación para el ejercicio pleno de los derechos religiosos que -dijo- están consagrados en las leyes nacionales.
El que conozca a este país, haya caminado por sus barrios y hablado con sus habitantes puede atestiguar la variedad y diversidad del cristianismo: desde iglesias ortodoxas, iglesias pentecostales, iglesias históricas reformadas como los luteranos, presbiterianos, metodistas, episcopales, vitanos, ejército de salvación, enumeró.
Remarcó que hay toda una pléyade de denominaciones religiosas que viven su fe en Cuba. La iglesia cubana está en crecimiento de su membresía, liderazgo, infraestructura y posee un impacto en la sociedad cubana y en la esfera internacional.
En este aspecto, el presidente del CIC aseguró que todas las organizaciones basadas en la fe cristiana en Cuba, participan plenamente de eventos internacionales, son miembros de organismos foráneos como es el caso del Consejo Mundial de Iglesias, la Alianza Conjunta de las iglesias para respuestas humanitarias o el Consejo Latinoamericano de Iglesias.
Dijo que en el país se desarrollan eventos internacionales cada año y reciben múltiples visitas por los vínculos históricos con sus contrapartes en Europa, Estados Unidos, Canadá, América Latina y Asia. Hay grupos que participan de programas de intercambio y en ellos destacan jóvenes que hacen estadías como voluntarios o misioneros.
Desde la experiencia del Consejo de Iglesias de Cuba, el reverendo Ortega apuntó la inserción de esas organizaciones en programas que impactan directamente en comunidades, requeridas de respuestas humanitarias ante daños por huracanes y otras catástrofes naturales.
En ese contexto comentó la contribución de las denominaciones religiosas en el acceso a sistemas de tratamiento y purificación del agua en las comunidades, así como la capacitación de las personas para el cuidado de la higiene en los barrios.
Mencionó el aporte de muchas iglesias y cristianos al desarrollo agrícola del país con su participación en la producción de alimentos; asimismo se refirió al apoyo a personas de la tercera edad en hogares de ancianos, y a otras que viven con discapacidades en sus lugares de residencia.
La iglesia en la isla antillana realiza trabajo de inserción social y, como otro actor dentro de la sociedad, participa en la construcción del proyecto de dignidad y justicia social para los cubanos, apuntó el reverendo. (Fuente:PL)