Cuba contribuye a proteger la capa de ozono

Editado por Maite González
2022-09-16 06:48:21

Pinterest
Telegram
Linkedin
WhatsApp

Por María Josefina Arce.

Hace 35 años se suscribió el Protocolo de Montreal, encaminado a proteger la capa de ozono, con la reducción gradual del empleo de las sustancias que la agotan, lo que representa un peligro para la vida en el planeta.

Esencial es la capa de ozono que filtra los  rayos ultravioletas procedentes del sol, que dañan a hombres, animales y plantas.

Desde su entrada en vigor en 1989 y en respuesta a los avances tecnológicos, el Protocolo ha sido ajustado y modificado en varias ocasiones para garantizar el cuidado del también llamado "escudo de la vida".

Cuba es signataria de  este importante acuerdo, que contribuye igualmente a los esfuerzos mundiales por frenar el cambio climático, pues la mayoría de las sustancias que dañan la capa de ozono son potentes gases de efecto invernadero.

Uno de sus primeros pasos fue la creación de la Oficina Técnica del Ozono, la que se encarga de coordinar y controlar el programa nacional de implementación del Protocolo de Montreal.

Seriamente comprometido, el país ha logrado eliminar los clorofluorocarbonos, presentes en la refrigeración doméstica y comercial y la sustitución de esos componentes en la fabricación de aerosoles farmacéuticos.

Asimismo, suprimió el uso del bromuro de metilo en la fumigación de semilleros de tabaco, cultivos protegidos de hortalizas y flores y viveros de café.

Respecto a los hidrofluorocarbonos, bajo la asesoría del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, ha realizado diversos proyectos de inversión y transferencia de tecnología para avanzar en la reducción de su uso.

A pesar de las limitaciones financieras que impone el bloqueo estadounidense, la Mayor de las Antillas ha trabajado intensamente para cumplir con los compromisos asumidos, esfuerzo reconocido internacionalmente.

En 2017 la ONU le entregó el Premio Ozono, que se otorga a países, grupos y organizaciones que han mostrado un compromiso y una contribución extraordinaria en la consecución de los objetivos del Protocolo de Montreal.

Cuba muestra tangibles resultados, pero no se detiene, pues tiene entre sus prioridades hasta 2030 eliminar el empleo de sustancias agotadoras de la capa de ozono.



Comentarios


Deja un comentario
Todos los campos son requeridos
No será publicado
captcha challenge
up